En Andolina los talleres son una herramienta más presentar actividades concretas a través de un formato estructurado por una persona adulta.


Su objetivo es dar respuesta a diferentes inquietudes que pueden estar relacionadas tanto con la organización del propio proyecto como con los intereses de los niños y las niñas. Los talleres,  programados por profes o incluso familias, surgen en base a la observación y evaluación de las necesidades reales del grupo.

Son momentos grupales en los que si cada peque decide y elige participar, debe cumplir unas normas y llevar a cabo una secuencia de pasos.

En las diferentes etapas los compromisos de participación de los talleres varían en función del momento evolutivo y las características particulares y únicas de niñas y niños. Así, en primaria, si acuden a los talleres antes tienen que apuntarse y comprometerse a asistir y terminar lo que empiezan.

En los talleres de Desarrollo Personal, por ejemplo, diseñados por Rebeca Bautista, nuestra pedagoga, se realizan distintas actividades creativas, de expresión corporal y de reflexión individual y colectiva.

La única pretensión es disfrutar y seguir regando la semilla del espíritu crítico de nuestras criaturas. Con respeto hacia nosotras mismas como personas y la imaginación como guía.


Ejemplo práctico

En estos talleres recientemente hemos llevado a cabo un breve análisis sobre el concepto de “felicidad”.  También realizamos diferentes propuestas creativas que nos llevaron a reflexionar sobre la “confianza” (en nosotros mismos y en los demás).

Además, acabamos de contar con la presencia de un estudiante en prácticas de una universidad italiana, cuya aportación ha sido muy enriquecedora, pues además de dedicarnos todo su tiempo, atención y conocimientos, también nos ha servido para conocer otro punto de vista a nivel cultural sobre conceptos como los ya citados (confianza y felicidad), y otros como “empatía”, “autoconcepto”

Cuando el tiempo lo ha permitido, las sesiones han sido realizadas en el exterior, lo cual también aporta comodidad a la hora de realizar las actividades, que prácticamente en su totalidad se realizan en grupo, en conjuntos o por parejas.

La elección de grupo es libre, por sorteo o según el criterio del profesorado, con el fin de fomentar nuevas relaciones, lo que supone nuevas adaptaciones, diferentes puntos de vista y salir de su zona de confort a nivel social, algo que tanto cuesta a veces pero que tan positivo resulta.

En suma, la combinación de estas actividades con los juegos tradicionales de exterior ha ayudado a cuidar del grupo y a fomentar su cohesión.